En los últimos tiempos algo ha cambiado en el perfil del alumnado que ingresa en la universidad española. Sus inquietudes y su actitud en clase no se parecen en nada a las de hace unos años. Sin embargo, no es justo criticar a las nuevas generaciones. Simplemente, no hay que caer en la trampa de comparar a los alumnos de hoy con los de hace años. Pertenecen a sociedades muy diferentes donde el uso de modernas tecnologías, las nuevas formas de relacionarse y otros muchas circunstancias han cambiado significativamente su comportamiento.
Via Gumersindo Fernández